Canadá juega con su liderazgo en inteligencia artificial
El presupuesto federal de la semana pasada comprometió $ 443,8 millones durante los próximos 10 años para renovar la Estrategia Pancanadiense de Inteligencia Artificial. Por casualidad, el presupuesto coincidió con la publicación por parte de la Unión Europea de la propuesta de reglamento de IA. La comparación de los dos muestra que Canadá está jugando un juego arriesgado al evitar un enfoque sólido y basado en los derechos para la gobernanza de la IA.
La IA es ahora una parte firme de cómo se gobierna la sociedad, y el enfoque de la UE es un marco legal intervencionista claro destinado a abordar la complejidad, la imprevisibilidad y el comportamiento autónomo de la IA. Su enfoque prohíbe ciertas aplicaciones de IA, en particular la mayoría de los usos del reconocimiento facial en el espacio público, estipula actividades de alto riesgo y luego pide mejores códigos de conducta y herramientas de evaluación para usos de riesgo bajo o moderado.
Las prohibiciones de la IA son bienvenidas y sensatas. Para muchos canadienses preocupados por la inteligencia artificial después de ver el exitoso docudrama El dilema social, la prohibición de la UE sobre la inteligencia artificial destinada a manipular el comportamiento de las personas o explotar sus vulnerabilidades parecerá eminentemente sensata.
Los usos de alto riesgo también deben cumplir con las obligaciones de supervisión, documentación y explicabilidad. El uso de la IA en el lugar de trabajo, en la educación y en el gobierno se considera de alto riesgo, lo que presta una atención crítica a las aplicaciones de la IA en estas áreas en Canadá. Incluso las aplicaciones de bajo riesgo deben ser más transparentes si el sistema interactúa con el público.
Por el contrario, el enfoque de Canadá sobre la regulación de la IA se asemeja a un castillo de naipes. A nivel federal, Canadá ha implementado de manera vacilante evaluaciones de riesgo para el uso de IA por parte del gobierno federal. Las reformas a la ley de privacidad proponen límites a la toma de decisiones algorítmicas. También estamos esperando una reacción al proyecto de reglamento de la Oficina del Comisionado de Privacidad de Canadá sobre IA, un programa que el presupuesto no mencionó. El presupuesto cumple la promesa del gobierno de un comisionado de datos encargado de proteger la integridad de los datos de los canadienses.
Comentarios
Publicar un comentario