En Toronto, el intento de Google de privatizar los fallos, por ahora
Si bien el fracaso se debe en parte a un mundo cambiado, esta explicación roza los últimos años de una participación pública sostenida en el proyecto, tanto de partidarios como de críticos. Desde su inicio, el proyecto no pudo apreciar hasta qué punto las ciudades siguen siendo fortalezas de la democracia y el proceso democrático.
Adaptado por Aniceto Pérez y Madrid, Filósofo de las Tecnologías y Editor de Actualidad Deep Learning (@forodeeplearn)
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